José Neves ha comprobado que la mayoría de las mascarillas disponibles en el mercado y que se autodenominan mascarillas quirúrgicas o mascarillas protectoras, son en realidad mascarillas higiénicas y cuya filtración antibacteriana se desconoce. Estas mascarillas se venden a precios más bajos y pueden confundir a los consumidores, ya que son idénticas en apariencia a las mascarillas quirúrgicas y las máscaras protectoras.
Las mascarillas quirúrgicas deben cumplir siempre con la norma EN14683, para garantizar su eficacia en la filtración bacteriana. En el caso de las mascarillas protectoras KN95, equivalentes a una mascarilla FFP2, cumplen con la norma EN149, tienen un mejor ajuste que una mascarilla quirúrgica y tienen una filtración antibacteriana > 95%. Las mascarillas quirúrgicas de tipo I tienen una filtración antibacteriana > 95%. Las mascarillas quirúrgicas de tipo II tienen una filtración antibacteriana > 98%. Las mascarillas quirúrgicas tipo IIR tienen una filtración antibacteriana > 98% y protegen contra salpicaduras. Las mascarillas higiénicas no se someten a pruebas certificadas para verificar su eficacia antibacteriana y, como tales, no están aprobadas por Infarmed.
Por ello, alertamos a todos nuestros Clientes y a la población en general, que tengan cuidado con el tipo de mascarillas que compran, porque con la salud no podemos arriesgarnos.
En José Neves disponemos de mascarillas desechables y reutilizables, debidamente certificadas por diversas Instituciones y Organismos, que demuestran la eficacia de la filtración antibacteriana.
Créditos: Foto de Vera Davidova en Unsplash.